Ingredientes
Para la masa
650 gr harina
7 gr de levadura en polvo
250 ml de leche
1/4 taza de Aceite de oliva con mantequilla
75 gr de azúcar blanco
½ cucharadita de sal
4 huevos
Para el relleno
150 gr de azúcar moreno
40 gr de harina
120 gr de mantequilla fría cortada en trozos muy pequeños
2 cucharaditas de canela
1 cucharadita de balsámico con canela pera
Para el glaseado
100 gr de azúcar glass
4 cucharadas de nata líquida
Un chorrito de agua
Instrucciones
Para la masa
Pon en el bol de la batidora la mitad de la harina con la levadura; mezcla todo bien y reserva.
A continuación, vierte en un cazo la leche con el azúcar, el aceite de oliva con mantequilla y la sal, y calienta poco a poco, sin que llegue a hervir.
Pon a batir la batidora a velocidad baja la mezcla de harina y levadura, incorporando poco a poco la leche con la preparacion anterior, y después los huevos, uno a uno.
Una vez la mezcla es homogénea, bate unos 3 minutos a velocidad máxima.
A continuación, incorpora poco a poco el resto de la harina, y bate a velocidad baja-media. Tras 3 ó 5 minutos, la masa estará elástica y no pegajosa.
Cambia al gancho para masas, o comienza a amasar sobre la mesa hasta conseguir la textura adecuada.
Pon la masa en un bol grande previamente engrasado, tapado con un papel film.
Déjalo fermentar en un lugar donde no haga mucho frío entre 1 hora y media y 2 horas, hasta que haya doblado su volumen.
Mientras tanto, prepara el relleno.
Para el relleno
En un bol, mezcla todos los ingredientes golpealos un poco para que se desmoronen.
Una vez la masa ha doblado su tamaño, aplástala con el puño para dejar que pierda el aire y espera 10 minutos.
Estira la masa en una superficie enharinada hasta formar la forma de un cuadrado de 30 cm x 30 cm.
Echa el relleno por encima y enrolla formando un rollo de masa, pegando los extremos con un poquito de nata líquida o leche.
Corta 8 rodajas iguales del rollo y colócalas sobre una fuente de horno de vidrio o cerámica un poco engrasada.
Deja reposar las rodajas del rollo durante 1 hora tapadas con papel film, hasta que doblen su tamaño.
Pinta las rodajas con un poco de nata líquida.
Hornea a 190° durante 25-30 minutos, hasta que estén dorados y al introducir un palillo en una de las rodajas salga limpio.
Para el glaseado
En un bol, tamiza el azúcar glacé.
Incorpora la nata líquida y mezcla los ingredientes con el chorrito de agua hasta que la mezcla sea homogénea.
Echa la mezcla sobre los rollos con la ayuda de la varilla y… ¡Ya tendrás tus rollos de canela listos para servir!